Respiro
y sé que
estoy en el momento exacto de mi vida.
Me silencio
y escucho el
rumor de mis sensaciones.
Cierro los
ojos
y veo todas
las imágenes propuestas por mi mente.
No medito
para deshacerme de nada,
ni para
conseguir nada.
Medito para
acoger lo que hay,
justo ahora.
Hay una
perfección que no está siendo vista.
Ámala.
No hay comentarios:
Publicar un comentario