Vistas de página en total

sábado, 21 de marzo de 2015

Últimas palabras

Despedidas nunca quise,
mas esta vez, si me fuerzo,
diré adiós para que no
te pienses que no te quiero.
En estos versos que escribo
tengo que ser muy concreto.
Octosílabos elijo
porque no digas que he muerto
sin demostrar mi valía
en lírica y en consejos.
Tú serás la lengua sabia,
nieto mío, de tus tiempos,
y hallarás la paz que habita
más allá de los tormentos.
Ahora tengo que irme,
volar hacia nuevos cielos,
cabalgar por otros bosques,
morar en otros desiertos.
No me da miedo morir
si en el vivir tuve acierto.
Pero, antes de partir,
he de contarte un secreto:
para empezar a vivir
hay que morirse primero.

1 comentario: